Isla Calavera. Día 3. Y Llegó La Cosa.

A plena velocidad y sin levantar el pie del acelerador, el Festival de Cine Fantástico de Canarias “Isla Calavera” entró el pasado viernes en su meridiano, situando aún más alto si cabe el listón de su programación. 1. “Extraordinary Tales”. Delicatessen Necrófila A las 16.30 abrió la jornada la película “Extraordinary Tales”, cinta de animación dirigida por Raúl García en la que se recopilan varios de los relatos de terror más populares de Edgar Allan Poe. Se trata de una auténtica delicatesen, un bocatto di cardinale que nos regaló el festival, tanto por lo que supone desde el punto de vista literario, como por el carácter artístico del componente visual de la propuesta. Arrancando con “La Caída de la Casa Usher” y cerrando con “La Máscara de la Muerte Roja”, la cinta otorga a cada relato un carácter único y distintivo a través de la imagen. Cada corto que compone el metraje de la película cuenta con su propia estética inspirada en diferentes corrientes pictóricas vanguardistas. Desde el punto cinematográfico, también se aportan muchos elementos de interés para el espectador, como la participación en el reparto de voces de Christopher Lee, Roger Corman, Guillermo del Toro, Julian Sands, o, el componente arqueológico, la recuperación de una grabación del mítico Bela Lugosi del relato “El Corazón Delator”. Raúl García le da mucho peso a la voz en off en la cinta, respetando la prosa de Poe y limitando mucho el uso de diálogos, por lo que esos narradores debían tener un peso muy importante en la producción. A todo esto hay que añadirle un extraordinario apartado musical a cargo del compositor Sergio de la Puente.

Como elemento menos agraciado, si bien resulta curioso, la trama original que sirve de enlace de los diferentes relatos no está a la altura de la riqueza literaria de la pluma de Poe, y desde el punto de vista de programación del festival, opinamos que esta película (la mejor que hemos tenido ocasión de ver en lo que llevamos de semana, descontando claro está el ciclo Carpenter) se merecía un mejor horario de proyección que las 16.30. Afortunadamente, Isla Calavera está obteniendo una buena acogida de espectadores, pero la primera sesión de la tarde siempre es la más difícil y la que supone más problemas de acceso para el público. También es cierto que éste fue el título escogido por la organización para las sesiones escolares, lo que nos parece un fabuloso acierto no sólo a la hora de propagar cultura audiovisual entre los más jóvenes, sino también por lo que supone de acercamiento desde una perspectiva diferente a uno de los mayores literatos de la historia universal. En cualquier caso, fue un verdadero lujo poder disfrutar de esta cinta en pantalla grande. 2. “Wax”. El Gusto por lo Clásico La segunda sesión del viernes estuvo dedicada a tres de los invitados de honor del festival: Víctor Matellano, Colin Arthur y Jack Taylor. Los tres son parte fundamental de la segunda película del día, “Wax”, un homenaje al cine clásico de terror, tanto en su variante de fantaterror español, como en su vertiente gótica anglosajona. En este sentido la película, primer largometraje de ficción de Matellano como director, supone un híbrido en el que coexisten dos tendencias narrativas. Por un lado tenemos todo lo relacionado con la figura del Dr. Knox, maravillosamente interpretado por Jack Taylor, con una puesta en escena más cuidada y canónica, y por otro está la parte de Mike, el periodista atrapado en el museo interpretado por Jimmy Shaw, que responde a los patrones del Found Footage. Particularmente esta bipolaridad de la narración nos genera una sensación de descompensación. Mientras que toda la parte gótica es muy disfrutable por la icónica presencia de Taylor, ese inquietante retrato del Dr. Knox, y todo el componente de efectos especiales, a través de los fantásticos prostéticos y recreaciones de Colin Arthur, la parte moderna del relato nos resulta más endeble, sin el encanto de la anterior y con un trabajo demasiado histriónico por parte de Jimmy Shaw. En cualquier caso, Matellano consigue dejar claro en su puesta en escena ese amor por el cine de terror clásico que tan bien ha sabido retratar en su faceta como ensayista (y que el sábado tuvimos ocasión de disfrutar con el documental “Zarpazos. Un Viaje por el Spanish Horror”).

Más interesante que la propia película fue el coloquio posterior protagonizado por los tres invitados, donde se indagó en el proceso de realización de la película, su vinculación con otros títulos del pasado, el arduo proceso de creación de las criaturas de Colin Arthur o, incluso, el auténtico contexto sobrenatural que acompañó a la producción durante su rodaje nocturno en los espacios del Museu de Cera de Barcelona. 3. “Black Hollow Cage”. Lazos Familiares La jornada continuó con la proyección de “Black Hollow Cage”, primer largometraje de Sadac González-Perellón, quien asistió también al festival y con el que hubo ocasión de entablar un debate posterior acerca de la complejidad narrativa de su propuesta. Con este título el festival situó sobre la mesa su carta más críptica e intelectual. Con un trasfondo de relaciones familiares conflictivas, una historia de venganza y una narrativa fragmentada que juega también con una trama de viajes en el tiempo, la película se arriesga a diferentes niveles. Visualmente González-Perelló hace una apuesta muy ambiciosa. Aprovechando el carácter vanguardista de la casa donde se rodó la película, emplea una puesta en escena muy esteticista, a base de planos generales, planos fijos y tomas largas, donde el tempo narrativo y el interpretativo se dilata hasta la extenuación, poniendo a prueba también la capacidad de aguante del espectador. Las emociones, los comportamientos de los personajes, incluso la propia comprensión de lo que está sucediendo queda bloqueada por el cineasta, que mantiene al público en la inopia durante la mayor parte del metraje, fascinado, eso sí por el valor plástico de la imagen, pero desconcertado con la trama que se le está narrando. Esto acaba teniendo un porqué y cuando la película ya parece carecer de una propuesta argumental coherente, el cineasta consigue darle un giro a todo, encajando las piezas del puzzle.

“Black Hollow Cage” fue, en ese sentido, la apuesta más arriesgada del festival y no dejó indiferente al público de la sala, como tampoco lo hizo su director, quien en el debate posterior se mostró cercano, pero al mismo tiempo provocador e irreverente. Si en la película pone en jaque en varias ocasiones la mirada del espectador, con una propuesta violenta y sexual que desafía la sensibilidad actual (especialmente en lo que se refiere a la aplicación de ambos conceptos en los personajes juveniles), sus comentarios durante el coloquio también estaban dirigidos a provocar e incomodar en ocasiones a los presentes. Además, hubo espacio para debatir entorno a la situación del cine español, las dificultades de propuestas independientes como ésta o la importancia de los festivales a la hora de servir como ventanas de exhibición para títulos que de otra manera no tienen cabida dentro del circuito comercial. 4. “La Cosa”. Cinefilia Pura

Finalmente, a las 23.30 llegó el momento que todos estábamos esperando. Con una sala rebosante de energía cinéfila, tuvo lugar la proyección del título más esperado del homenaje a John Carpenter, “La Cosa”. Gran amante del cine clásico de ciencia ficción de la década de los 50, además de idolatrar a Howard Hawks, el cineasta tuvo la ocasión de ofrecer su propia versión de “El Enigma del Otro Mundo” de 1951, que a su vez estaba basado en el relato de John W. Campbell “¿Quién Anda Ahí?”. Recién salido de “1997: Rescate en Nueva York”, el director ofreció la que a día de hoy está considerada como su mejor obra y uno de los pocos remakes que verdaderamente superan al original. Protagonizada por espléndido Kurt Russell, la cinta es un claustrofóbico relato cargado de paranoia hacia “el otro”, con una narrativa impecable y un sentido del ritmo y de la tensión absolutamente magistral. El apartado de efectos especiales, con una titánica labor del especialista Rob Bottin, siguen resultando impactantes 35 años después, así como el diseño de una criatura polimorfa, de la que Carpenter nos va mostrando distintas variantes, algunas tan aterradoras como el torso mandíbula o la cabeza araña.

La expectación generada en el festival ante la proyección de este título quedó refrendada por un coloquio posterior que se alargó hasta pasadas las 2 de la mañana y en él se habló de la trascendencia de este título para el género de ciencia ficción, pese al fracaso que supuso en su momento, coincidiendo en cartelera con otros títulos como “E.T. El Extraterrrestre” o “Blade Runner”. La música de Ennio Morricone y la reutilización de algunos de sus temas descartados en “Los Oidioso Ocho” de Quentin Tarantino fue otro de los temas tratados durante la charla, así como las diferencias con la precuela estrenada en el año 2011. Al igual que sucediera con las dos sesiones del ciclo Carpenter anteriores, proyección y charla supuso todo un acontecimiento cinéfilo, donde además de la película se disfruto del ambiente generado en la sala por todos los espectadores y la complicidad a la hora de disfrutar de un título de culto de estas características. Tras esto, el festival superaba su meridiano y se preparaba para su clausura, que se desarrollaría entre el sábado y el domingo.